El vendaje neuromuscular mundialmente conocido como kinesiotaping es un revolucionario dispositivo terapéutico que desde los años setenta ha venido introduciendo un nuevo concepto dentro de todos los sistemas de vendajes asi como tambien se ha ido abriendo campos de aplicacion desde sus inicios en el rendimiento deportivo hasta una gran cantidad de afecciones muculo-esqueleticas, en el campo de la medicina fisica y la rehabilitación.
Este aplicativo terapéutico pude ser calidficado como novedoso ya que mientras otros tipos de vendaje centran su filosofía en inmovilizar o estabilizar artificialmente las estructuras músculo-articulares y ligamentosas del cuerpo, lo cual puede, en algunos casos ser contraproducente porque se inhiben los estímulos, debilitan la musculatura y disminuyen el reisgo sanguíneo, aspectos que influyen negativamente en el proceso de rehabilitacion de sistema osteomuscular; el vendaje neuromuscular fue diseñado para facilitar el preoceso de curacion natural del cuerpo permitiendo apoyo y estabilidad a los músculos y las articulaciones sin restringir el alcance del movimiento del cuerpo, el vendaje neuromuscular es en si mismo un estímulo para incidir a todos los sistemas del organismo y facilitar los procesos de cuaración.
El vendaje tiene unas caracteristicas muy similares a las de la piel, en cuanto a grosor y elasticidad; se trata de un esparadrapo elástico constituido en un 100% por una estructura trenzada de hilos de algodón, que incorpora una capa de pegamento llamado cyanoacrilato de uso médico que le confiere adhesividad. Esta capa de pegamento es antialérgica, no contiene latex e imita la huella dactilar para favorecer la transpiracion y la elevación de la piel.
La piel y las Fascias
La piel es el órgano vital mas grande del cuerpo, cubre toda nuestra superficie corporal y presenta diferentes grosores en diversas regiones del cuerpo; por ejemplo; en las palmas de las manos y plantas de los pies, es mucho más gruesa, que en regiones como los párpados, donde es muy delgada.
A su vez la piel posee diferentes grosores de sensibilidad de acuerdo con la distribucion topográfica y densidad de los receptores cutáneos; sin embargo en promedio, un centímetro cuadrado de piel posee cuatro metros de nervios, un metro de vasos y cinco mil órganos sensitivos, incluyendo las terminaciones nerviosas libres que transmiten el dolor y el prurito.
De otra parte, para poder comprender los efectos del vendaje neuromuscular es muy importante resaltar la estrecha interrelación que existe entre la piel y las fascias y de estas ultimas con todos con todos los tejidos corporales principalmente los del aparato musculo-esquelético.
Las fascias son una serie ininterrumpida de tejidos conectivos resistentes pero retráctiles que se encuentran desde la cabeza a los pies y desde el exterior al interior del cuerpo, un tejido continuo que envuelve todo el organismo y todas las estructuras en él contenidas; teniendo en cuenta que la porcion mas profunda de la piel, la hipodermis, se une a la fascia superficial, los estímulos y efectos mecánicos generados en la piel se trasmiten a las fascias superficiales y de estas a las profundas.
Efectos del Vendaje Neuromuscular
Efeto analgésico
Cuando el aparato osteomuscular es sometido a estimarientos, contracciones musculares por sobresolicitación, sobrecargas articulares y descompensaciones a lo largo del día, aparecen las contracturas, los espasmos, las restricciones del flujo sanguíneo y linfático, inflamaciones que en definitiva aumentan la presión intersticial, este aumento activa el estímulo sobre los nocioceptores los cuales envían aferencias sensoriales dolorosas.
Cuando de produce daño al tejido, se liberan o se sintetizan sustancias algogénicas en el mismo tejido lesionado, cuando estas se acumulan en cantidad suficiente, activan los nociceptores o mantienen la excitación; unas activan directamente el nociceptor (prostaglandinas, histamina, serotonina), otras no producen dolor por ellas mismas sino que disminuyen el umbral de excitación del nociceptor (prostaglandinas PGE2 y PG129) y otras alteran la microcirculación local.